Es importante reaccionar correctamente para no empeorar los daños que sufren los autos que quedan bajo el agua.
Siempre que llega una temporada de lluvias, es común ver en redes sociales y noticieros las imágenes de un carro inundado al tratar de pasar por vías con altos niveles de agua, o en los sótanos de edificios donde el agua de las fuertes lluvias supera la capacidad de evacuación, dejando carros sumergidos. Si su carro es afectado por alguna de estas situaciones, es importante saber cómo reaccionar para evitar daños mayores.
El daño más grave que se puede presentar en un carro inundado se denomina golpe hidráulico, el cual se presenta cuando entra agua a los cilindros de un motor y empieza hacer la compresión; al ser un líquido, no es posible comprimirlo, generando oposición al trabajo normal de los pistones, ocasionando deformaciones y fracturas en elementos vitales del motor como válvulas, biela, cilindros y pistones, entre otros.
El golpe hidráulico se puede presentar cuando el vehículo transita por vías o terrenos donde el nivel agua supera la altura del ducto de admisión de aire, o al encender un auto que ha estado expuesto a niveles altos de agua y le ha ingresado agua a las cámaras de combustión.
La principal recomendación, es no tratar de encenderlo, hasta que un experto evalúe la gravedad de la situación, con el fin de determinar las acciones a tomar sin empeorar los daños ya ocasionados por el agua. Generalmente se revisan las partes mecánicas, el motor y sistemas eléctricos para determinar si los daños fueron severos y determinar si es posible repararlas.
Un vehículo que ha estado totalmente sumergido en el agua, tiene muchas posibilidades de volver a funcionar normalmente, siempre y cuando se efectúe la revisión y diagnóstico adecuados, procesos que abarcan la inspección de los sistemas mecánicos y electrónicos, así como de las piezas de tapicería y de carrocería.
Es necesario destapar el motor para extraer el agua y luego de un minucioso proceso de limpieza se deben remplazar empaques y verificar que los componentes queden en optimas condiciones para poner en marcha el sistema. La cajas de cambios, de dirección y sistemas de arranque también deben ser sometidos a inspección y fluidos como aceites, líquidos de frenos y refrigerantes deben ser remplazados ya que pudieron contaminarse, perdiendo sus propiedades, lo cual generaría daños futuros.
Es la que requiere mayor dedicación y tiempo, debido a la complejidad de componentes que generan, transportan y requieren electricidad para el correcto funcionamiento de múltiples sistemas de un auto, lo cual se realiza con multímetros y escaners especializados para detectar fallas y corregirlas, luego efectuar procedimientos de secado que eliminen cualquier rastro de humedad.
En este aspecto la mejor decisión es la de remplazar elementos como aislantes y espumas, luego de desbaratar todo el interior del auto y limpiar la carrocería, pues solo así se garantiza que no se deterioren las piezas metálicas por oxidación y que no se generen malos olores por humedad u hongos.
Todos estos procesos requieren mucha dedicación, tiempo y cuidado, por lo cual si el afectado tiene el auto amparado con una póliza, en muchos casos las aseguradoras prefieren declarar el auto como pérdida total y proceden a desembolsar el monto por el que el carro se encuentra asegurado, ante la dificultad de los arreglos o la consecución de repuestos.
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